Pasos importantes
- Prueba con el equipo adecuado: ponte un pantalón holgado y calcetines técnicos de esquí durante la prueba para evitar puntos de presión.
- Ponte de pie para comprobar la sensibilidad: tus dedos deben rozar ligeramente la parte delantera de la bota, es normal antes de flexionar.
- Aprieta en el orden correcto: cierra primero la correa (strap), luego ajusta los ganchos de abajo hacia arriba, sin forzar; haz algunas flexiones para asentar bien el pie y vuelve a apretar ligeramente si es necesario.
- Verifica la sujeción al flexionar: una vez en posición de esquí (flexión hacia adelante), el talón debe permanecer bien apoyado, los dedos no deben tocar la puntera y no debe haber holgura lateral ni puntos dolorosos.
- Deja margen para el asentamiento: en una bota nueva, no la aprietes al máximo desde el principio; la espuma y el botín interior se compactarán con el uso, así que deja algunos clics libres para ajustar más adelante.
- Aprovecha un botín termoformable si lo tiene: esto permite, tras unas cuantas bajadas, conseguir un ajuste casi a medida y optimizar el confort y la sujeción.
Martín te enseña cómo probarte correctamente unas botas de esquí para que tu confort sea óptimo y quedes muy satisfecho con tu compra.
¿Qué ropa hay que llevar para probarse unas botas de esquí?
Es importante privilegiar los pantalones amplios para evitar un efecto torniquete en las rodillas. Un pantalón demasiado estrecho podría perturbar tu circulación sanguínea y provocarte dolores en los pies que nada tengan que ver con las botas.También es importante llevar un par de calcetines técnicos que se ciñan al empeine y que estén reforzados en zonas sensibles como el maléolo, la punta o el talón.
Por otro lado, evita los calcetines muy gruesos de lana, pues te harán perder toda la sensibilidad y precisión del calzado y, además, podrían incluso ser incómodos por su espesor. Un calcetín demasiado espeso hace que el pie esté demasiado apretado y por tanto provoca una mala circulación sanguínea y una sensación de frío desagradable.
Además, si estás acostumbrado a utilizar plantillas anatómicas para el deporte, te aconsejamos que reemplaces las plantillas originales de tus nuevas botas de esquí por las tuyas personales. Ganarás en confort y precisión.
¿Cómo amarrarte las botas de esquí?
Empieza abriendo todas las hebillas de la bota de esquí y no dudes en girarlas media vuelta para evitar que se enganchen a las muescas del cierre.
Debes probarte las botas de pie. Ábrelas bien y desliza el pie dentro. Tus dedos deberían tocar la punta de la bota. Es normal, pues todavía no te has inclinado hacia delante en posición de esquí.
Para el cierre, te recomendamos empezar por la correa de arriba y luego apretar, sin forzar, las hebillas de abajo hacia arriba. Haz algunas flexiones para que tu pie se coloque correctamente en el interior de la bota y revisa el cierre de cada hebilla. Si tus hebillas disponen de un cierre micrométrico no dudes en girarlo un poco para ajustar con precisión la potencia del cierre. Las hebillas deben sujetar firmemente, pero sin comprimir el pie.
Si es necesario, reajusta la correa.
¡Ya está! ¡Tus botas de esquí están bien apretadas!
Debes probarte las botas de pie. Ábrelas bien y desliza el pie dentro. Tus dedos deberían tocar la punta de la bota. Es normal, pues todavía no te has inclinado hacia delante en posición de esquí.
Para el cierre, te recomendamos empezar por la correa de arriba y luego apretar, sin forzar, las hebillas de abajo hacia arriba. Haz algunas flexiones para que tu pie se coloque correctamente en el interior de la bota y revisa el cierre de cada hebilla. Si tus hebillas disponen de un cierre micrométrico no dudes en girarlo un poco para ajustar con precisión la potencia del cierre. Las hebillas deben sujetar firmemente, pero sin comprimir el pie.
Si es necesario, reajusta la correa.
¡Ya está! ¡Tus botas de esquí están bien apretadas!
¿Cuáles son las precauciones que tienes que tomar cuando te amarres las botas?
En unas botas nuevas, para que el cierre será óptimo, no coloques la hebilla en el último diente del cierre, pues tu botín se apretujará, el acolchado termoformado tomará la forma de tu pie, y cuando necesites apretar más tu bota no podrás hacerlo. Es mejor que dejes un margen de algunas muescas. Utiliza para ello el ajuste biométrico de las hebillas.
¿Cómo probar la talla de las botas de esquí?
Como dijimos anteriormente, cuando estás de pie y con la pierna estirada, los dedos del pie deberían tocar ligeramente la punta de la bota. Es normal, pues el talón todavía no está calzado contra la parte posterior de la bota.Inclínate un poco hacia delante en flexión como si estuvieras sobre los esquís y vas a sentir cómo el pie se echa hacia atrás en la bota. En ese momento, tu talón debería estar bien sujeto en la parte trasera y tus dedos no debería tocar la punta. No deberías sentir holguras laterales ni molestias en el maléolo, la tibia, el empeine o la punta del pie.
¿Cuál es la ventaja del botín termoformable?
Cada vez más botas de esquí disponen de un botín termoformable. Estos botines modernos utilizan un acolchado ergonómico que reacciona a una temperatura muy baja, incluida la temperatura de tu cuerpo. Solo hará falta esquiar algunas horas o días para tener tu botín a medida.
¿Necesitas un nuevo par de botas de esquí?
En Glisshop encontrarás todas las grandes marcas de botas de esquí con modelos adaptados a toda la familia. Para hombre, mujer y niño, para descenso o travesía... ¡elige las botas que te hacen falta! También encontrarás numerosos accesorios para calzado en nuestra sección dedicada al confort de los pies como, por ejemplo, calcetines técnicos de esquí, plantillas ergonómicas y caloríficas o seca botas eléctricos.