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Friends y empotradores en escalada

La escalada es un deporte de aventura emocionante que ofrece una combinación única de desafíos físicos y mentales. Pero además de las habilidades atléticas, contar con un equipo de calidad y un conocimiento profundo de las herramientas es esencial para la seguridad y el éxito del escalador. Los empotradores, sean mecánicos o pasivos, son herramientas imprescindibles que permiten a los escaladores asegurarse en las grietas de la roca y mantenerse seguros mientras se aventuran en terreno vertical. Descubre su función, uso y cómo elegirlos para enriquecer tu experiencia en la escalada.

Los empotradores, cuya punta está diseñada para encajar en grietas estrechas, son dispositivos de aseguramiento en escalada pensados para ofrecer una sujeción segura y fiable en la pared rocosa. Básicamente existen dos tipos: mecánicos (o activos) y pasivos. Los empotradores mecánicos, también conocidos como friends o empotradores de leva, tienen piezas móviles que les permiten contraerse para entrar en la grieta y luego expandirse para quedar bloqueados en su interior, logrando así un anclaje por empotramiento. Los empotradores pasivos, en cambio, son piezas de metal fijo que se encajan en las grietas por el peso del escalador. Estos suelen ser empotradores de cable, conocidos por su versatilidad y resistencia a los impactos y al desgaste. Los empotradores son herramientas imprescindibles para cualquier escalador serio. Comprenderlos y saber utilizarlos correctamente puede marcar la diferencia entre una ascensión segura y exitosa, y una situación potencialmente peligrosa. Así que invierte tiempo en familiarizarte con estas herramientas.

El uso de los empotradores depende en gran medida del tipo de escalada que practiques. En la escalada tradicional, por ejemplo, los escaladores utilizan empotradores para crear sus propios puntos de anclaje a medida que ascienden. Se colocan tan frecuentemente como sea posible, siempre que una grieta lo permita. Es un proceso que requiere buen conocimiento de la roca, habilidades en la colocación del material y una evaluación cuidadosa de la seguridad. Al colocar un empotrador, el escalador debe tener en cuenta varios factores, como el tamaño y la forma de la grieta, el tipo de empotrador y las fuerzas que se aplicarán en caso de caída. Tras insertar el empotrador en la grieta, se recomienda darle un golpe seco para asegurar una buena fijación.

La elección del empotrador ideal depende de varias variables, incluyendo el tipo de roca, el tamaño de la grieta y tu nivel de comodidad y experiencia con los distintos tipos de empotradores. Entre los empotradores más populares, los empotradores de escalada Black Diamond son reconocidos por su calidad y seguridad, lo que los convierte en una opción apreciada por escaladores experimentados. Los empotradores mecánicos suelen ser más fáciles de colocar y retirar, pero también son más caros. Los empotradores pasivos son más asequibles y pueden ser más versátiles, aunque a menudo requieren mayor destreza para colocarlos de forma segura. Al final, la mayoría de los escaladores llevan una variedad de empotradores para poder adaptarse a diferentes situaciones.

Como recordatorio, una cinta exprés completa para escalada está compuesta por un mosquetón, un empotrador y una combinación de cintas y cuerdas. El empotrador juega un papel crucial en esta configuración, sirviendo de enlace entre la cuerda de escalada y la roca.

Una selección de sacadores ligeros y prácticos

Un sacador es una herramienta fina y con gancho, esencial para los escaladores de escalada tradicional (también llamada ""trad"" o terreno de aventura). Su función principal es ayudar a extraer empotradores o protecciones móviles (como friends o hexentrics) que se colocan en las grietas de la roca para asegurar el avance del escalador.

Así es como funcionan los sacadores y por qué son importantes:

En terreno de aventura, los escaladores colocan empotradores en las grietas para anclar su cuerda y asegurar su progresión. Sin embargo, a menudo sucede que los empotradores se quedan atascados por el peso o la presión ejercida. Un sacador permite liberarlos sin dañarlos ni arriesgarse a que se queden aún más bloqueados.

Durante el descenso o al pasar un segundo de cordada, el sacador permite quitar los empotradores rápidamente. Esto evita perder demasiado tiempo retirándolos manualmente, lo que podría ser difícil y agotador en altura.

El sacador de escalada es, por tanto, una herramienta imprescindible para los amantes de la escalada tradicional que quieren recuperar sus protecciones con total seguridad.