Las diferentes ceras para deslizamiento

Hoy en día, todas las ceras de deslizamiento a la venta son 100% libres de flúor, tras la prohibición del uso de flúor en el encerado por motivos medioambientales y sanitarios. En efecto, desde 2020 la normativa europea prohibió los compuestos fluorados (PFOA) en estos productos, y la FIS (Federación Internacional de Esquí) vetó su uso en competición a partir de la temporada 2020-2021. Los fabricantes tuvieron que afrontar este reto desarrollando nuevas formulaciones sin flúor igual de eficaces gracias a varios años de I+D y pruebas sobre el terreno.

Antes de ver las categorías actuales de ceras, recordemos brevemente cuáles eran las antiguas familias de ceras fluoradas hoy en desuso:

Antiguas categorías de ceras (con flúor):

• CH (Hidrocarbonada) – cera de mantenimiento básica sin aditivos fluorados. Se utilizaba con frecuencia para nutrir la suela, sin dañarla, y mantenerla en buen estado. Idealmente, se aplicaba una capa de CH (a menudo un CH azul universal) después de cada jornada para conservar un deslizamiento duradero.

• LF (Low Fluor) – cera ligeramente fluorada, destinada principalmente al entrenamiento. Más hidrófoba que una CH, ofrecía un mejor deslizamiento en las sesiones de práctica y podía servir como base de competición (capa inferior) antes de aplicar una cera más avanzada. Sin embargo, se usaba menos para el mantenimiento habitual, ya que el flúor podía resecar la suela con el tiempo.

• HF (High Fluor) – cera altamente fluorada diseñada para la competición, especialmente eficaz en nieve húmeda (alto nivel de humedad) al reducir el efecto ventosa. Se aplicaba directamente sobre la suela (a veces antes de una capa de polvo) o sobre una base LF para economizar producto. Muy hidrófoba, la HF eliminaba rápidamente la película de agua bajo el esquí, mejorando notablemente el deslizamiento en nieves mojadas. Era la cera base imprescindible para los competidores, ya que aumentaba la durabilidad del encerado en carrera y optimizaba la eficacia de los acabados tipo Cera.

• Cera (polvo ultra-fluorado) – polvo de acabado ultraeficiente aplicado justo antes de una competición, sobre una capa HF. Con una concentración extrema de flúor, la Cera proporcionaba un tratamiento hidrófobo máximo para un deslizamiento excepcional. Su uso se reservaba para pruebas importantes debido a su alto coste y a su toxicidad durante la aplicación (uso obligatorio de mascarilla). Nota: el uso repetido de estos productos fluorados tenía un impacto perjudicial tanto para la salud de los preparadores como para el medio ambiente, de ahí su prohibición desde 2020.

Ceras de deslizamiento sin flúor: la nueva norma

Actualmente, las líneas de ceras de deslizamiento disponibles son 0% flúor. Cada marca ofrece productos sustitutivos que garantizan una excelente calidad de deslizamiento sin contaminantes. Por ejemplo, la nueva serie Swix Bio apuesta por formulaciones innovadoras respetuosas con el medio ambiente sin comprometer el rendimiento. Por su parte, desde 2021 la marca Toko transformó toda su gama de ceras a versiones sin flúor. Incluso fabricantes especializados como Vola ofrecen ahora ceras de alto rendimiento: su línea HMach de ceras de competición sin flúor incorpora nuevos aditivos (lubricantes a base de cerámica, etc.) que constituyen una auténtica alternativa a las antiguas ceras fluoradas, con una mejora significativa en la capacidad de deslizamiento.

¿Cómo orientarse entre las distintas ceras de deslizamiento actuales?

Se pueden clasificar, como antes, según el nivel de uso: cera de mantenimiento, cera de entrenamiento, cera de competición y cera de acabado. Cada una se presenta en diferentes durezas/colores según la temperatura de la nieve, como en los tiempos de las CH/LF/HF (los códigos de color siguen vigentes: amarillo para temperaturas cálidas, rojo/violeta para intermedias, azul/turquesa para frías, etc.). A continuación, un repaso de las categorías de ceras sin flúor disponibles hoy:

Ceras de mantenimiento (universales / recreativas)

Son las ceras básicas sin flúor, equivalentes modernos de las antiguas CH. Su función principal es proteger y saturar la suela para conservar el material y garantizar un deslizamiento constante a lo largo del tiempo. Se aplican con frecuencia, idealmente después de cada jornada de esquí, para nutrir la suela y evitar que se reseque. Generalmente compuestas de parafina hidrocarbonada (sin aditivos especiales), estas ceras de mantenimiento son versátiles y fáciles de aplicar. Se encuentran tanto en versión “universal” (una sola referencia que cubre un amplio rango de temperaturas, práctica para el público general) como en versiones específicas por rango térmico (ceras de taller para ajustar según el tipo de nieve). Las ceras universales o de mantenimiento son adecuadas para la mayoría de los esquiadores recreativos que desean un esquí bien preparado y protegido sin buscar el máximo rendimiento.

Ceras de entrenamiento (rendimiento intermedio)

Las ceras de entrenamiento sin flúor sustituyen a las antiguas LF (nivel intermedio). Proporcionan un deslizamiento más eficiente y duradero que las ceras de mantenimiento, gracias a aditivos técnicos (polímeros sintéticos, ceras especiales, etc.), donde el flúor ha sido reemplazado por otros agentes hidrófobos. Estos productos están pensados para esquiadores habituales, clubes o competidores aficionados que realizan muchas sesiones y buscan un buen rendimiento sin recurrir a las costosas ceras de competición cada vez. En la práctica, una cera de entrenamiento ofrece mayor hidrofobicidad (reduce mejor la fricción agua/nieve) para lograr mayor velocidad y mejor durabilidad. Puede utilizarse antes de una carrera local o como capa base antes de aplicar una cera de competición el día de la prueba (ahorrando la cera de gama alta y mejorando su adherencia sobre la suela mediante una impregnación previa). Para un esquiador recreativo exigente, este tipo de cera representa un excelente equilibrio entre rendimiento y precio en el uso diario.

Ceras de competición (nivel racing)

Son las sucesoras de las antiguas HF y Cera, naturalmente sin flúor. Las ceras de competición están formuladas para ofrecer el máximo deslizamiento posible en un rango de nieve determinado, maximizando la repelencia al agua (efecto hidrófobo) y la resistencia al desgaste. Incorporan aditivos de vanguardia (nuevas ceras sintéticas, micropartículas como carbono/grafito para nieves sucias, molibdeno para nieves transformadas, lubricantes de alta tecnología tipo cerámica, etc.) con el fin de minimizar la fricción y evacuar rápidamente la humedad bajo el esquí, tal como hacían las fluoradas de gama alta en el pasado. Una cera de competición se aplica generalmente la víspera o la mañana de la prueba, sobre esquís previamente tratados con una cera base más blanda (para una mejor impregnación). El objetivo es conseguir un auténtico incremento de velocidad en las zonas de deslizamiento, algo determinante en competición. Dado su coste, se reservan para carreras y esquiadores que buscan el máximo rendimiento.

Ceras de acabado para competición

Por último, para las competiciones de más alto nivel, existen nuevamente productos de acabado “top coat” sin flúor (polvos, sprays aceleradores) que se aplican como última capa antes de la salida, tal como se hacía con la Cera en el pasado. Estos polvos no-flúor de nueva generación mejoran aún más la velocidad y la durabilidad del encerado durante las pruebas más exigentes, ofreciendo un deslizamiento excepcional en los primeros kilómetros de carrera.

Tabla resumen de las ceras de deslizamiento sin flúor